Al principio, Daniel creyó que estaba teniendo una alucinación masiva. En medio de un juego de rol, fue teletransportado a un castillo. Era un gran jugador de videojuegos, un gran fanático de las películas de ciencia ficción y un jugador novato de juegos de rol. Daniel era un tipo promedio. Con ganas de seguir jugando dentro del RPG para crear su propia aventura, decide acompañarlo hasta que su delirio llega a su fin. Una vez dentro del castillo, Daniel es habitado por una sombra misteriosa.
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